Este mes se conmemora la lucha contra el cáncer cutáneo, una enfermedad que se asocia con la exposición al sol y a los rayos ultravioleta.
De acuerdo con la Asociación Colombiana de Dermatología y Cirugía Dermatológica (AsoColDerma), el cáncer de piel es un crecimiento anormal y acelerado de las células de las capas de la piel. Se desarrolla principalmente en áreas que han sido expuestas a los rayos ultravioleta, los cuales generan mutaciones en el ADN. Este puede ser de dos tipos: melanoma (CPM) y no melanoma (CPNM); éste último representa el carcinoma más común en humanos, con el 95% de los tumores malignos de la piel.
Dentro del cáncer no melanoma está el carcinoma basocelular (CBC), que representa el 80% de los registros, y el carcinoma escamocelular (CEC), que representa el 20% de los casos. Aunque este último es de menor proporción, puede tener un buen pronóstico cuando se detecta y trata oportunamente. Sin embargo, un porcentaje de casos desarrolla un cuadro de enfermedad avanzada ya sea localmente – carcinoma escamocelular localmente avanzado (CECla)- o presenta enfermedad metastásica -CEC metastásico (CECm)-.
Diagnóstico y tratamiento
El diagnóstico de esta enfermedad se hace mediante la exploración clínica por parte del dermatólogo y debe ser confirmado por medio de una biopsia que evalúa el compromiso local y el riesgo de encontrar enfermedad a distancia (metástasis). El tratamiento debe ser coordinado por un equipo multidisciplinario con dermatólogos oncólogos, oncólogos clínicos, cirujanos de cabeza y cuello, radioterapeutas, entre otros.
Dentro de las opciones terapéuticas se encuentran: la quimioterapia tópica, la criocirugía (destrucción del tejido anormal mediante nitrógeno líquido o dióxido de carbono líquido), la cirugía convencional, la radioterapia o la inmunoterapia.
Factores y grupos de riesgo
Las causas ambientales constituyen factores de riesgo para el desarrollo del carcinoma escamocelular cutáneo. Los estudios epidemiológicos indican que la exposición acumulada al sol, especialmente a radiación UVB, es la causa ambiental más importante de este tipo de cáncer. En cuanto a los grupos con mayor posibilidad de adquirir la enfermedad están los pacientes con trasplante de órganos sólidos, leucemia linfoide crónica o VIH/SIDA, entre otras, debido a la alteración de la vigilancia inmunológica contra las células cancerígenas. Cifras de Holanda y Noruega indican que son más frecuentes los casos en pacientes trasplantados de riñón y corazón que en la población general, pasando de 65 a 250 registros. En Estados unidos, por su parte, se estima que el 35% de los trasplantados de corazón desarrollarán un cáncer de piel en los 10 años posteriores al trasplante. Por otro lado, cifras de pacientes de EE.UU de VIH con antecedente de CPNM tienen un riesgo dos veces mayor de desarrollar un segundo CEC.
¿Cómo está Colombia? Recientemente, el Instituto Nacional de Cancerología (INC) publicó la última versión de su anuario estadístico, correspondiente a 2017. En él se evidencia que el cáncer de piel continúa siendo la patología tumoral maligna con el mayor número de diagnósticos nuevos en esta institución, sumando 712 casos para el año reportado.
De acuerdo con la información poblacional disponible para Colombia, se estima que la incidencia actual de este cáncer puede estar alrededor de 102 casos nuevos por 100.000 personas año. Así mismo, tomando como base la más reciente proyección de población colombiana mayor de 29 años (25´937.237), el número absoluto de casos nuevos de cáncer de piel por año puede estar alrededor de 26.456. El 83% de estos casos podrían ser CPNM (21.958 casos) y, de estos, el 24% serían casos nuevos de CEC (5.270 casos).
Según el Doctor Guillermo Sánchez, Profesor Investigador Titular de la Fundación Universitaria de Ciencias de la Salud, “el 80% de los casos de CEC del país se dan en el sector agropecuario, 50% de estos se dan en personas que oscilan entre los 42 a 91 años y 69% de esta cifra corresponde a mujeres. Los extensos periodos de tiempo que pasan los campesinos colombianos en la tierra hacen que su piel sea el principal receptor de los rayos ultravioleta (UVB), sin tener consciencia alguna del cuidado que debe tenerse. Actualmente, el 53% de los pacientes son procedentes del área rural; Cundinamarca (64%) y Boyacá (14%) cuentan con las mayores tasas representativas de la enfermedad. Por eso, en el Día Mundial contra el cáncer de piel es necesario recordar lo importante que es protegerse del sol y ser consciente de los inmensos daños que puede traerle al órgano más grande de nuestro cuerpo”.
De acuerdo con las proyecciones disponibles para Colombia, se estima que para 2020 pueden presentarse 264 casos nuevos de CECLA y alrededor de 195 casos que progresen a CECm. En esa línea, el doctor Sánchez manifiesta que como esta es una patología con bajo potencial de producir la muerte, no ha alcanzado la visibilidad e interés de otras patologías neoplásicas y, actualmente, al no existir una terapia específica aprobada para esta enfermedad, el manejo que se le da al CEC avanzado es como el de cualquier otro tipo de cáncer. El doctor Guillermo Sánchez, habló para El Espectador de esas estrategias para prevenir el cáncer de piel.
¿Hay alguna edad de mayor riesgo para desarrollar la enfermedad?
Es una patología que se manifiesta en los adultos por encima de los 40 años y los adultos mayores. Pero debemos tener claro que es una enfermedad que se gesta en los años de la infancia. Pues los niños están expuestos a largas horas de sol en sus jornadas escolares y con los años se va acumulando esa exposición a la radiación ultravioleta. Pero, además, también es una enfermedad que se acumula si las personas están expuestas al sol cuando van a la playa y hacen recorridos de varias distancias.
¿El color de piel influye en algo?
Las personas que tienen un tipo de piel muy blanco y que son muy sensibles a la radiación ultravioleta, y se quema haciendo un enrojecimiento de la piel tienen un mayor riesgo. También las personas que no se queman tanto, y que tienden a quedar como bronceadas tienen un mayor riesgo de desarrollar la enfermedad. Las personas de raza negra tienen una protección natural por su color, no están exentos, pero tienen menor probabilidad de padecer cáncer de piel.
¿Cómo prevenir su aparición?
Desde la Organización Mundial de la Salud, hay cuatro estrategias preventivas que están ligadas con evitar la radiación ultravioleta, para ello recomiendan a las personas estar a la sombra en las horas de mayor intensidad de radiación que son desde las 9:00 am hasta las 4:00 pm. Usar ropa de manga larga, sombreros de ala ancha y protector solar que tenga un factor de protección mínimo de 30 y preferiblemente 50. El llamado es que las personas creen consciencia y sepan que todos podemos padecer esta enfermedad pero que en nuestras manos está evitarla. Un llamado especial para los padres y cuidadores, que cuiden a los niños, les apliquen bloqueador y les enseñen cómo cuidar la piel.
Fuentes: https://www.elespectador.com/